miércoles, noviembre 25, 2009

Un día para recordar


Hoy es un día de esos que a uno le gustaría no celebrar. ¿Por qué? Porque se celebra (en el sentido negativo del concepto) un fracaso social, un fracaso como humanidad, el de la violencia de género.


Una violencia ruin, una violencia de odio que sale de las tripas, una violencia que no puede ser comparada con la violencia también desgraciada que sale de la cabeza en la lucha por unos ideales equivocados o no.

Igualmente y especialmente es un fracaso de los hombres, de los hombres en su acepción de varones, porque como con la prostitución esto es una cosa de nosotros, de todos nosotros que demasiadas veces hemos amparado a nuestros amigos, a nuestros familiares, sabiendo que ejercían una violencia física y/o psicológica sobre nuestras amigas, familiares,...

Hemos avanzado mucho, este país no es el de hace 50, 20 o incluso 10 años, el techo de cristal parece que en algún momento tendrá sus primeros picotazos en pro de la igualdad real.

No sé si estaréis de acuerdo conmigo que la ventaja de este país, nuestro país, España, tiene una sociedad que aprehende muy rápido, muy rápido se da cuenta de las desigualdades y de lo que ha de cambiar, permitirme la licencia de mi impresión de estos cambios atendiendo a tres ejemplos:

1.- El tráfico: las campañas de la DGT, el carné por puntos,... se han asumido y ahora se defienden a capa y espada incluso se duda de la efectividad de retirar penalizaciones por puntos.

2.- El movimiento gay: la visibilización de esta realidad es el ejemplo máximo de cambio de mentalidad social, ¿quién nos lo iba a decir hace simplemente 10 años?

3.- La violencia de género: les pese a quién le pese este país es una potencia mundial, de las pocas que hay, en que se ha tomado esta lacra social en serio. Pero si incluso a Zapatero el gobierno sueco le puso mala cara por alabar las novelas de Stieg Larsson que denuncian esa violencia en un país tan avanzado en otras cosas como es Suecia. ¿No es para sentirse orgulloso?

Por todo eso y enlazándolo con el acto de esta mañana del Centro Joven de Salud que hace una gran labor para la verdadera alarma que me produce que el 40% de las ordenes de alejamiento del último año hayan sido por acoso a mujeres de 16 a 30 años. Por todo esto y mucho más:

BASTA YA
VIOLENCIA DE GÉNERO = CERO

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